Yelow-billed Pintail

 

Longitud total: 520 mm. Sexos iguales. Pico amarillo con caballete y uña negros; partes superiores de la cabeza castaño herrumbroso claro estriado finamente de pardo oscuro, lados de la cabeza y cuello ante pálido o blanquecino estriado finamente de pardo oscuro; barba, garganta y cuello, por delante, en su parte superior, blanquecinos. Pecho anterior y flancos, pardo oscuro con las plumas ampliamente marginadas de pardo acanelado; parte posterior del pecho y vientre, pardo claro y ampliamente marginado de blanco, lo que le da aspecto de blanquecino; infracaudales pardas con las plumas marginadas de pardo acanelado. Dorso y escapulares pardas y marginadas ampliamente de pardo anteado; supracaudales pardas con las plumas marginadas de pardo anteado a acanelado; timoneras pardo oscuro con el margen de las plumas de color anteado. Cobertoras alares menores y medianas pardo grisáceo; mayores con amplio borde apical anteado ocráceo claro; secundarias pardo negruzco con tenues reflejos verdosos y banda terminal anteado ocráceo pálido; primarias, pardo; terciarias, pardo con una estría ancha a lo largo del raquis de color negruzco a negro y de aspecto aterciopelado; cobertoras subalares y axilares, pardo grisáceo. Patas gris oliváceo.

La hembra es similar al macho en la coloración general, pero un poco más pequeña, el espejo alar es pardo grisáceo y la cola es más corta; los jóvenes son parecidos a los adultos, pero de coloración más opaca.

Se lo puede identificar por su tamaño, su cabeza de forma redondeada, su cuello fino y largo y su cola larga y puntiaguda; se lo reconoce fácilmente por el pico amarillo y la coloración dominante parda. Se puede confundir ocasionalmente con el Pato Barcino (Anas flavirostris), con el que más comúnmente se lo encuentra asociado, pero su silueta, tamaño y tonalidad más clara los diferencia; en vuelo las cobertoras subalares y axilares oscuras sirven también para su identificación.

Muy común y abundante, vive en bandadas a veces muy numerosas; se lo encuentra en lagunas, bañados, arroyos, ríos y lagos, con vegetación palustre emergente o sin ella; para alimentarse frecuenta los rastrojos, a veces lejos del agua y casi siempre en las horas crepusculares y nocturnas. De vuelo veloz, cuando se traslada a sus comederos lo hace en grupos sucesivos que luego se unen en bandadas muy compactas; aparte de las semillas obtenidas en campos de cultivos se alimenta de otras materias de origen vegetal y completa su dieta con diminutos invertebrados. La vocalización del macho consiste en un silbido muy característico, la hembra emite un graznido áspero y nasal muy común a la mayoría de las hembras de las distintas especies de patos.

Nidifica en el suelo, ocultando el nido entre la vegetación herbácea o en matorrales, preferentemente a cierta distancia del agua, o en bañados y mallines; lo ubica en una simple depresión del terreno, lo tapiza en el fondo con pastos y lo cubre con abundante plumón. Pone hasta 12 huevos de color crema rosado, la incubación y cuidado de los pichones la efectúa solamente la hembra. Dada su gran adaptabilidad a todo tipo de ambientes de agua dulce o salobre, también aparece en medios marinos; es sin duda el pato más común, no sólo en la Patagonia sino en todo el país. En la Patagonia lo podemos encontrar desde Neuquén y Río Negro hasta Tierra del Fuego y las islas Malvinas; en toda esta región vive la raza Anas georgica spinicauda. En las islas Georgias del Sur, la raza Anas g. georgica, endémica de esta isla y tan diferente a la raza continental que no se descarta que se trate de una especie distinta; se diferencia de ésta por su tamaño mucho menor, la coloración dominante de un pardo más oscuro en el dorso y más parda en el pecho y abdomen, el pico más corto y las plumas de la cola de ocho pares, dos más que en la subespecie Anas g. spinicauda.